Física y Ruleta: ¿una combinación ganadora? 17.05.2012

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En la década de 1970, un estudiante titulado, Doyne Farmer, descubrió la forma de vencer las probabilidades de las mesas de ruleta utilizando un ordenador portátil. Farmer nunca reveló mucha información acerca de cómo lo hizo, pero recientemente un profesor de la Universidad de Oxford presentó un ensayo resaltando sus métodos, en respuesta a dos científicos que trataron de reproducir su trabajo.

Michael Small de la Universidad de Australia Occidental y Michale Tse de la Universidad Politécnica de Hong Kong se inspiraron en el trabajo de Farmer y decidieron hacer un experimento propio. Utilizando un smartphone o un ordenador pequeño demostraron que los jugadores pueden mejorar las probabilidades.

Para probar la teoría, en primer lugar, los científicos dividieron los movimientos del juego en dos partes. La primera parte era muy previsible dado que ambos grababan lo que pasaba mientras la bola giraba alrededor de la rueda. La segunda parte era menos predecible dado que los hombres grababan lo que sucedía cuando la bola caía en la rueda y empezaba a rebotar. Small y Tse grabaron el momento en que la rueda de la ruleta y la bola pasaban por un punto determinado. Utilizando estos datos, podían determinar aproximadamente dónde caería la bola en la rueda y luego la sección en la que, con mayor probabilidad, se detendría la bola.

Con un pequeño dispositivo de conteo, comparable al que utilizó Farmer, Small y Tse predijeron correctamente 13 veces de 22 la mitad de la rueda en la que la bola caería y predijeron correctamente 3 veces el casillero exacto. Repitieron el experimento 700 veces y pudieron mejorar las probabilidades de los jugadores, aumentándolas en un 18% en base a una rueda de ruleta europea.

Algunos jugadores han repetido este truco y le han informado a Small acerca de sus éxitos.